Conexión cruzada en medio árbol

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La unión cruzada de madera o tableros es una de las más efectivas y extendidas en un entorno de carpintería. Donde no se use: en techos, en la fabricación de muebles y objetos decorativos de madera maciza, etc. Consideremos hoy cómo hacerlo confiable y duradero.
El principio básico de este compuesto es la rigidez del ajuste de los elementos para contrarrestar su tracción y rotura. Debido a esto, por ejemplo, se calculan las cargas permisibles en el elemento prefabricado del techo. La precisión de la conexión garantiza su integridad y durabilidad, incluso en ausencia de elementos de fijación adicionales: pegamentos, pasadores, clavos o tornillos autorroscantes. Los japoneses incluso tienen ese arte: "Kigoroshi", cuyo significado es hacer que la conexión (no solo cruzada) sea lo más precisa y exacta posible.

Las herramientas


  • Sierra para metales;
  • Plaza de carpintería;
  • Varios cinceles de diferentes anchos;
  • Martillo con metal enérgico.

Cómo hacer una articulación transversal en medio árbol


Supongamos que necesitamos hacer una cruz para un árbol de Navidad, un maniquí o algún tipo de artículo interior. Para esto tomamos dos bloques de madera con una sección de 4-5 cm. Los cortamos a lo largo de aproximadamente 30-50 cm. Para tales productos, son adecuadas las especies de madera no sólida, por ejemplo, pino, álamo o aliso, que se procesan más fácilmente.

Encontramos el centro de la primera barra y marcamos las dimensiones del ancho de la segunda. Para marcar las líneas transversales, utilizamos un cuadrado de unión con un borde delimitador.

Con una sierra para metales, en los bordes de la marca, hacemos cortes a la mitad del grosor de la barra. Agregamos algunos cortes más para una operación más fácil de la matriz. Lo mismo debe hacerse en la segunda barra, solo en la imagen espejo.

Aquí, los cinceles de varios anchos se utilizan como herramientas de corte. El más estrecho puede cortar la parte principal, haciendo una limpieza aproximada de la superficie. Y aquí, con un cincel más ancho, limpie el plano de corte limpiamente. Para cortar, es conveniente utilizar un mazo con un punzón de goma o madera.

No vale la pena activar todo el grosor de la matriz a la vez. Comience a cortar primero en un lado y luego en el opuesto. De esta forma evitará chips y grietas imprevistas que arruinarán el aspecto y la integridad de la conexión.

Al finalizar el trabajo con cinceles, un cuadrado o una regla, verifique la uniformidad de los planos y las caras laterales de la unión en ambas barras y, si es necesario, recoja las rebabas de los bordes de las piezas de trabajo.

Y ahora ha llegado el momento del matiz más importante de la tecnología Kigoroshi. Las partes no cortadas restantes de las barras en la unión de la cruz deben aplastarse ligeramente con un martillo con un martillo de metal. La esencia del método es aplastar ligeramente la madera, pero no permitir que se agriete. Esto debe hacerse en ambos lados de nuestras barras.

Plantamos las barras en el lugar de su conexión, presionando firmemente con la mano. Si el ojo no está flojo, será bastante difícil hacerlo manualmente. Con el mismo martillo, clavamos suavemente la unión desde arriba a través de una junta de madera.

Las barras cruzadas firmemente colocadas se sujetan de manera firme y confiable sin pegamento ni alfileres. Sí, y esa conexión se ve muy estéticamente agradable y ordenada. Por cierto, los japoneses aconsejan, antes de sujetar directamente la cruz, humedecer los bordes de la barra presionada con un martillo con agua. La humedad hará que las fibras de madera se hinchen y vuelvan a su posición original, lo que significa que la conexión sea aún más densa y fuerte. Y después del secado, el travesaño se puede desmontar y reutilizar si es necesario.

Consejos prácticos


El trabajo con cinceles en la fabricación de tales juntas de espiga implica su afilado excepcional. De lo contrario, no se pueden evitar astillas y grietas. Puede afilarlos en un círculo de fieltro o en un cinturón de cuero engrasado con pasta Goya, llevando sus cuchillas al borde de la cuchilla de afeitar.

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